miércoles, 18 de noviembre de 2009

Las necróplis

Pompeya
3ªParte
h)Las necrópolis





















En Pompeya, al igual que en el resto de ciudades romanas, tenía sus necrópolis a las afueras de las murallas.

En esta ciudad destacan la de la puerta de Nocera, la de la puerta de Nola, la de la puerta de Herculano y la puerta del Vesubio. En cada uno de estos lugares, cada familia se construía su tumba o su panteón.

Otros edificios de interés

Pompeya
3ªparte
g)Otros edificios de interés

Las tabernas

Las tabernas, a diferencia de la actualidad, eran lugares donde se vendía comida caliente o bebida. Los romanos usaban estos locales cuando tenían que comer fuera de sus casas.

Las Panaderías

En Pompeya había varias pnaderías, pero una de las que mejor se conservan pertenecía a Popidius Priscus. Su local carecía de mostrador porque es probable que vendiera el pan a por mayor o a través de vendedores ambulantes. Había dos habitaciones al lado del horno que se utilizaban para el almacenamiento del pan recién horneado y como granero. Cabe destacar que en Roma, el consumo de pan se extendió a partir del siglo II a.C.

Las lavanderías

En la época romana se usaba la orina como desengrasante y como lejía para limpiar la ropa. Tenía tanta importancia que el emperador Vespasiano impuso un impuesto sobre ella.

Las casas de Pompeya

Pompeya
3ªParte
f)Las casas de Pompeya

La casa pompeyana

Pompeya es una ciudad rica y con mucha influencia griega, esto se nota en las villas, grandes casas situadas en la ciudad en las que se mezclan los estilos y espacios de la casa romana y la griega. Y que presentan las siguientes características:

1. Están orientadas hacia el interior y no hacia el exterior, carecen de ventanas y la luz y el aire entran por dos áreas centrales entorno a las que se articulan las demás estancias, estas áreas son: el atrio, que tiene abierta la parte central del techo, y el peristilo, parecido a un gran patio columnado.

2. Son normalmente de un solo piso.

3. Cada espacio está dedicado a un solo uso, ya sea comer (triclinium), dormir (cubiculum), reunirse (tablinum), etc...

Primero encontramos un zaguán o vestíbulo, del que pasamos a la puerta , subimos el umbral (limen), generalmente de mármol y elevado sobre el plano del vestíbulo y de la calle. A ambos lados los postes que sujetaban la puerta en sí. Tras pasar la puerta hay una habitación, en algunas casas un simple corredor, las fauces.

El atrio es un gran espacio vacío con una abertura en el techo, el impluvium, por donde entra la luz y el agua de lluvia, que se recoge en una pila o compluvium. Los primeros romanos hacían la vida en el atrio , pero en la época de la destrucción de Pompeya frecuentaban más las habitaciones interiores y sólo queda como recuerdo el altar de los lares, los dioses protectores de la casa y la familia.

El tablinum es una gran habitación que fue la destinada al padre, y en época clásica hacía las funciones de despacho y sala de reuniones. Está también abierta hacia el peristilo, pero generalmente en invierno esta salida se cierra con grandes paneles de madera que se retiran en verano.

El cubiculum es donde dormian el amo y su familia. Estaban lujosamente decorados.

El peristilium era un jardín rodeado de un pórtico, generalmente de dos pisos, sostenido por columnas, a veces tiene una fuente o pilas de agua.En torno al peristilium hay también habitaciones,usadas como comedores o despachos.

El triclinium se usa para las cenas veraniegas y está en el peristilium(jardin).Cada banco que rodea la mesa; es un triclinio, tiene este nombre por que en el se tumbaban (clino) tres personas (tri).El triclinio normal era generalmente de madera o de hierro y se cubrían con colchones, almohadones y sábanas.

Fuera de la casa, habia muchas estancias adosadas, que generalmente se usaban como tabernas, bares, tiendas y negocios de todo tipo.


La Villa de los Misterios


Es uno de los edificios suburbanos de Pompeya, situado a unos doscientos metros de la Puerta de Herculano, fuera de los límites de la ciudad. Se trata de una construcción que presenta una disposición armoniosa y singular de sus ambientes y una superlativa colección pictórica. Fue construida en la primera mitad del siglo II a. C. y fue muchas veces remodelada y ampliada. Se presenta como una construcción de cuatro lados circundada por una terraza panorámica. Después del terremoto del año 62 la Villa cambió de propietarios y de usos: de vivienda señorial pasó a establecimiento agrícola.

Los usos finales de esta Casa constituyen el ejemplo de una vivienda de gran lujo unida a una explotación agrícola ganadera. Integrada al paisaje mediante grandes pórticos y galerías que dan a jardines colgantes, la Villa de los Misterios se muestra muy distinta de las casas encontradas en la ciudad.

Si bien casi todas sus paredes se encuentran decoradas con pinturas, destacan una serie de grandes frescos que se supone que representaban la iniciación de las esposas a los Misterios Dionisíacos. En la llamada Sala de la Gran Pintura, se desarrollan una serie de frescos que datan del siglo I a. C., que representarían los momentos sucesivos de un ritual que Roma intentó limitar sin mucho éxito.

Las imágenes son muy elocuentes: un niño leyendo el ritual bajo la supervisión de una matrona, una joven que lleva una bandeja con ofrendas, un grupo de señoras en una celebración sacramental, un sileno que toca una lira mientras una jovencita ofrece su seno a una cabra, otro viejo sileno ofrece bedidas a un pequeño sátiro mientras otro más joven le alcanza una máscara teatral, entre muchas otras. También se representan las bodas de Dionisio y Ariadna.

lunes, 16 de noviembre de 2009

El foro de Pompeya

Pompeya
2ªParte
e)El foro de Pompeya

Templo de Júpiter

Este templo cierra la plaza del Foro en el lado norte. En un principio fue contruido para venerar a Júpiter, después del año 80 a. C. fueron también veneradas Juno y Minerva. El templo fue construido en el siglo II a. C., fue gravemente dañado por el terremoto del año 62 d. C. y estaba siendo restaurado al momento de la erupción del Vesubio.

Edificios municipales

Al sur del foro estaban todos los edificios destinados a la vida pública, La Basílica, Las Oficinas Municipales y el Comicio.A la derecha se levantaban numeroso edificios dedicados a la actividad económica y comercial, intercalados con algunos religiosos. Son edificios rectangulares, se cree que la sala oriental era la de los magistrados, la central el tabularium y la otra la de los decuriones. En la fachada sur se halla el comitium, recinto donde se reunía el pueblo para ejercer sus derechos políticos y administrativos. Data del 89 a.e.c.

Basílica

Se trata de la sede de la administración de justicia, y junto con el Foro constituía el edificio más importante de la ciudad. Tenía cinco puertas que abrían hacia el Foro, que daban paso a tres naves internas. La época de la fundación se calcula hacia el 120 a. C.




Templo de Apolo


Frente a la Basílica se encuentra el Templo de Apolo, el edificio religioso más importante de Pompeya. El culto al dios Apolo, importado de Grecia, estaba muy difundido en la región de Campania. En Pompeya, como lo han demostrado las investigaciones realizadas en el área de este templo, se remonta al siglo VI a. C., si bien su aspecto actual recoge una remodelación del siglo II a. C. y una restauración posterior al terremoto del 62 d. C., que al momento de la erupción aún no se había terminado.

Se supone que además de Apolo (de quien se encontró una estatua en el acto de arrojar una flecha), otras divinidades eran veneradas en este recinto: Diana cazadora y Mercurio.

El mercado

El Macellum era un gran mercado cubierto con una fuente de agua en el centro donde se lavaban los pescados. Fue construido en la época del Imperio.

Al lado del mercado se encontraba una amplia construcción de la misma época, identificado como el Templo de los Lares Públicos, es decir, de las divinidades tutelares de la ciudad, a las cuales había sido dedicado después del terremoto que había aterrorizado a los pompeyanos.

La ciudad de Pompeya

Pompeya
2ªParte
d)La ciudad de Pompeya



El foro


El foro era el centro cívico y el corazón de la vida comercial de Pompeya. Era un amplio espacio abierto con forma rectangular rodeado en tres de sus lados por una columnata y en el otro por el Templo de Júpiter, con varios edificios públicos importantes en torno a él.

Constaba de un área libre de 145 m. de longitud por 38 m de anchura, estaba pavimentada en piedra. En ella se erguían estatuas conmemorativas del emperador, de miembros de su familia o de ciudadanos locales de alguna importancia.

Era típico ver en el foro mesas o banquetas donde los vendedores exponían sus productos al público, se colocaban en los bordes de la zona libre, junto a las columnatas y cuando llovía se trasladaban a los corredores, unos pasillos que estaban techados donde la gente paseaba y solía negociar.

Al foro se accedía mediante una gran puerta de bronce, dentro del foro no se permitía el transporte carruajes.

En el foro había tablillas expuestas al público donde se escribía noticias importantes de la época, como el resultado de las últimas elecciones o la fecha de algún espectáculo, e incluso había gente que aprovechaba para exponer sus quejas o para hacer publicidad de su establecimiento. Un ejemplo encontrado de ellos sería: "Macerior ruega al edil que prohíba a la gente hacer ruido en la calle y moleste a las personas decentes que están durmiendo".

El foro triangular

Se trata de un área sagrada de forma triangular, situada en una pequeña colina desde la que se aprecia una vista panorámica de la costa. Se accede a la plaza por el vértice norte del triángulo mediante un elegante pórtico precedido por seis columnas jónicas.

En la parte anterior del pórtico se encuentra la base sobre la que se colocaba una estatua honoraria de M. Claudio Marcello, nieto de Augusto. El edificio que determinó la creación de esta área sagrada es un templo muy antiguo, del siglo VI a. C. Originalmente dedicado a Hércules, considerado por los habitantes de Pompeya como el fundador de su ciudad, también se dedicó más tarde al culto de Minerva.

El teatro grande

Adyacente al Foro Triangular se encuentra el Teatro Grande, de la primera mitad del siglo II a. C., construido a la manera del mundo griego y helenístico, aprovechando la pendiente natural de una colina y restaurado y ampliado notablemente en la época romana. El espacio reservado a los espectadores estaba dividida en tres órdenes de gradas de mármol. El escenario tenía las tres puertas clásicas.

El teatro tenía un gran pórtico cuadrangular bastante bien conservado, donde los espectadores podían entretenerse antes del espectáculo y durante los intervalos. Luego del terremoto del año 62, este pórtico fue transformado en cuartel de gladiadores.

El teatro chico


El odeum, odeón, fue construido en el 80 a.e.c. Estaba destinado a los espectáculos musicales y a recitar poesías. Según las inscripciones poseía una cubierta que le dotaba de una acústica excelente. Una balaustrada decorada con patas de grifo aladas, separa la media cavea de la ima, donde se conservan las gradas donde estaban los asientos destinados a los decuriones. Tenia una capacidad de 1.500.- espectadores.

El anfiteatro y la palestra

El Anfiteatro de Pompeya fue realizado inmediatamente despues de la fundacion de la colonia silana, en el 80 a.C, por obra de los duunviros Quintus Valgus y Marcus Porcius, a los cuales se deba tambien el Odeion.
Es el anfiteatro mas antiguo que ha llegado hasta nuestros dias (el Anfiteatro de Tauro, el primero construido con piedra en Roma, data del 29 a.C.), y tiene por lo tanto un gran interes para nuestro conocimiento de este tipo arquitectonico caracteristico de la civilizacion romana. Por otro lado, la region de Campania ha sido justamente considerada la patria de los combates entre gladiadores, de los cuales se tienen noticia al menos a partir del siglo IV a.C.
La arena fue excavada hasta un nivel de unos 6 metros por debajo del plano natural, y la tierra extraida fue utilizada para realizar un terraplen de apoyo de la mitad occidental del edificio.
Aqui se erigio un muro de contencion con contrafuertes y grandes arcos ciegos, que forma la fachada principal del conjunto: contra el mismo se adosan dos escalinatas dobles al oeste y dos escalinatas simples al norte y al sur, a traves de las cuales se tiene acceso a un ambulacro descubierto que llegaba hasta la summa cavea.
La entrada a la media y a la ima se realizaba a traves de cuatro corredores que conducian a la crypta, una galeria abovedada que pasa por debajo de las gradas inferiores de la media cavea y que se abre por medio de arcos a dos filas de asientos.
Los dos corredores principales dan acceso tambien a las entradas de la arena ubicadas en la extremidad del eje mayor y estan empedrados para permitir el paso de los carros.
Mientras el pasillo norte esta orientado en el mismo eje de la arena, el otro cruza el lado oeste del edificio, doblando luego en angulo recto para desembocar en la extremidad sur de la arena, al no ser posible crear una abertura en este lado pues estaba adosado a las murallas de la ciudad.

La palestra era un lugar dedicado a la práctica del ejercicio, la lucha y el deporte. Solía estar rodeado de columnas y se encontraba cerca de las termas y del gimnasio. En la Antigua Roma, este espacio abierto o porticado, también fue utilizado como lugar de reunión, donde se discutía sobre temas literarios.



Termas Stabianas

Sobre la Via Stabiana luego del cruce con la Via dell'Abbondanza, se encuentran las Termas Stabianas, las más antiguas de la ciudad, del siglo IV a. C. Las termas muestran signos de sucesivas restauraciones, la última de ellas tuvo lugar luego del terremoto del año 62. Estaba compuesta por una sección masculina y otra femenina. Tenía un sofisticado sistema de calefacción: el aire caliente circulaba bajo el piso y entre las paredes.

Tanto la sección masculina como la femenina estaba compuesta por una sala de vestir (apodyterium), una sala con piscina de agua fría (frigidarium), de una sala templada (tepidarium) y de una sala muy calefaccionada (calidarium), dotada de una bañera para agua caliente y de una fuente para abluciones con agua tibia. Además había otros ambientes, algunos anexos al gimnasio y una gran piscina para nadar al aire libre.

Termas centrales

Las Termas Centrales fueron ampliadas luego del terremoto del año 62 y para el 79 aún no estaban completamente terminadas. Eran exclusivas para hombres, carecían de frigidarium, pero tenían un servicio del que carecían las otras termas: el laconicum, un ambiente para baños de vapor con aire caliente y seco. Este complejo, por la luminosidad y amplitud de los ambientes, su gran gimnasio y la excelente calidad del material de construcción, se puede asemejar a las termas de las grandes ciudades, incluida Roma.

Termas del foro

Las Termas del Foro, si bien no son las más grandes de la ciudad, son de mucho interés debido a la elegante decoración y el excelente estado de conservación del calidarium y del tepidarium de la sección masculina.

Dos corredores permiten, en el caso de las termas para hombres, el paso al apodypterium de donde se pasa al frigidarium, en cuyo centro de encuentra una bañera circular para los baños fríos; y al tepidarium, decorada con fino estuco de la mitad del siglo I a. C. Allí se conserva un gran brasero que servía para calentar el ambiente, donado por Marcus Nigidius Vaccula. Del tepidarium se accede directamente al ambiente para baños cálidos, el calidarium calefaccionado con aire caliente que pasaba por el interior de las paredes dobles.

Esta habitación está dotada de dos bañeras: el alveus, de forma rectangular, para los baños calientes, y el labrum, con agua fría.


El lupanar

De lupa que en latín significa loba que es como se conocía a las prostitutas, el Lupanar era el más importante de los numerosos burdeles que se encontraron en Pompeya, y el único construido con esta precisa finalidad.

Las prostitutas eran esclavas griegas u orientales, su precio iba de dos a ocho ases (el vaso de vino costaba uno), pero la recaudación era del patrón o del dueño del burdel.

El Lupanar era un pequeño edificio situado en el cruce de dos calles secundarias, estaba constituido por una planta a nivel del suelo y un primer piso. La planta baja estaba destinada al acceso de esclavos o de las clases más pobres; tenía un corredor y cinco habitaciones con cama, las paredes estaban cubiertas de pinturas que expresaban distintas posiciones eróticas.

Al piso superior se accedía por una entrada independiente que daba a una escalera y luego a un balcón. A ese balcón daban las distintas habitaciones, más grandes y decoradas que las de la planta baja. Este piso era reservado a una clientela más acomodada.

La construcción es del último período de la ciudad. Las paredes se encuentran cubiertas de motivos eróticos desde su entrada principal, que muestra a Príapo con dos penes sostenidos por las manos.

domingo, 15 de noviembre de 2009

Las excavaciones

Pompeya
2ªParte
Las excavaciones

Gruesas capas de ceniza cubrieron dos ciudades situadas en la base de la montaña, y sus nombres y localizaciones fueron olvidados. Herculano fue redescubierta en 1738, y Pompeya en 1748.

Intervino como patrono y visitante frecuente de los trabajos, el Rey Carlos VII de Nápoles, mucho más conocido como Carlos III de España entre 1759 y 1788 en que muere en Madrid. Este Rey siguió también y patrocinó expediciones arqueológicas hispanas en Yucatán, sobre restos de pirámides mayas, hoy conocidísimas.

Fue ingeniero director de los trabajos de Pompeya y Herculano el aragonés Roque Joaquín de Alcubierre y colector y mantenedor de muchas esculturas encontradas durante una treintena de años, hoy preservadas en Madrid, Roma y Nápoles.

Desde entonces, ambas villas han sido excavadas revelando numerosos edificios intactos, así como pinturas murales. Realmente el descubrimiento tuvo lugar en el año 1550, cuando el arquitecto Fontana estaba excavando un nuevo curso para el río Sarno. Pero hubo que esperar 150 años antes de que se iniciara una campaña para desenterrar las ciudades. Hasta esa fecha, se asumía que Pompeya y Herculano se habían perdido para siempre.

Se ha sostenido la teoría (sin demostrar) de que Fontana, inicialmente encontró algunos de los famosos frescos eróticos, y debido a la estricta moral reinante en su época los enterró de nuevo en un intento de censura arqueológica. Excavadores posteriores plasmaron en sus informes que los lugares en los que estaban trabajando habían sido desenterrados y enterrados de nuevo con anterioridad.

El foro, los baños, muchas casas y algunas villas permanecieron en un sorprendente buen estado de conservación. Un hotel de 1000 m² fue descubierto a escasa distancia de la ciudad, y hoy en día se le conoce como "Gran Hotel Murecino".

Pompeya es la única ciudad antigua de la que se conoce de forma precisa su estructura topográfica, sin modificaciones posteriores. No estaba distribuida en un plano regular como solía ocurrir con las ciudades romanas, debido a la irregularidad del terreno. Pero sus calles eran rectas y formaban una rejilla al más puro estilo romano, con su cardo y su decumano. Estaban pavimentadas con piedras poligonales y había casas y comercios a ambos lados.

Un importante área de las investigaciones se centra en las estructuras que estaban siendo restauradas durante la erupción (presumiblemente dañadas en el terremoto del año 62). Algunas de las pinturas antiguas dañadas pudieron ser cubiertas con nuevos frescos, y se utilizan modernos instrumentos para analizar las pinturas ocultas. La razón más probable por la cual esas estructuras todavía estaban siendo reparadas 10 años después del terremoto era la creciente frecuencia de pequeños temblores que precedieron a la erupción.

Durante las excavaciones, ocasionalmente eran hallados huecos en la ceniza que habían contenido restos humanos. En 1860, el arqueólogo italiano Giuseppe Fiorelli sugirió rellenar estos huecos con yeso, obteniendo así moldes que mostraban con gran precisión el último momento de la vida de los ciudadanos que no pudieron escapar a la erupción. En algunos de ellos la expresión de terror es claramente visible. Otros se afanan en tapar su boca o la de sus seres queridos con pañuelos o vestidos tratando de no inhalar los gases tóxicos, y alguno se aferra con fuerza a sus joyas y ahorros. Tampoco falta quien prefirió ahorrarse el tormento quitándose la vida, conservándose su cuerpo junto a pequeñas botellitas que contenían veneno. Los perros guardianessiguen encadenados a las paredes de las casas de susamos, al igual que los gladiadores del anfiteatro (en este último caso, acompañados de una misteriosa mujer cargada con todas sus joyas de gala).

El número actual de víctimas detectadas es de unas 2000, y es de esperar que aparezcan muchas más en las partes de la ciudad que todavía no han sido excavadas.

La ciudad ofrece un cuadro de la vida romana durante el siglo I. El momento "inmortalizado" por la erupción evidencia literalmente hasta el mínimo detalle de la vida cotidiana. Por ejemplo, en el suelo de una de las casas (la de Sirico), una famosa inscripción Salve, lucrum ("Bienvenido, dinero"), quizás con intención humorística, nos muestra una sociedad comercial perteneciente a dos socios, Sirico y Numiano (aunque este último bien podría ser un apodo, ya que numus significa moneda). En otras casas abundan los detalles sobre diversos oficios, como los trabajadores de la lavandería (fullones). "Pintadas" grabadas en las paredes son muestras del latín empleado en la calle.

En el año de la erupción, se calcula que la población de Pompeya era de unas 20.000 personas. La ciudad estaba situada en una zona donde abundaban las villas vacacionales, y contaba con numerosos servicios: el macellum (gran mercado de alimentos), el pistrinum (molino), los thermopolia (una especie de taberna que servía bebidas frías y calientes), las cauponae (pequeños restaurantes) y un anfiteatro.

En 2002 un importante descubrimiento en la desembocadura del río Sarno reveló que en el puerto también había viviendas, muchas de ellas palafitos con un sistema de canales que sugieren una cierta similitud con Venecia.

El Vesubio

Pompeya
1ªParte
b)El Vesubio


Monte Vesubio

El monte Vesubio (italiano: Monte Vesuvio; latín: Mons Vesuvius) es un volcán activo del tipo vesubiano situado frente a la bahía de Nápoles y a unos nueve kilómetros de distancia de la ciudad de Nápoles. Se encuentra en la provincia de Nápoles, perteneciente a la región italiana de la Campania. Tiene una altura máxima de 1.871 msnm y se alza al sur de la cadena principal de los Apeninos.

Es famoso por su erupción del 24 de agosto del año 79, en la que fueron sepultadas las ciudades de Pompeya y Herculano. Tras aquel episodio, el volcán ha entrado en erupción en numerosas ocasiones. Está considerado como uno de los volcanes más peligrosos del mundo, ya que en sus alrededores viven unos tres millones de personas y sus erupciones han

sido violentas; se trata de la zona volcánica más densamente poblada del mundo. Es el único volcán situado en la parte continental de Europa que ha sufrido una erupción en el siglo XX. Los otros dos volcanes italianos que han entrado en erupción en las últimas centurias se encuentran en islas: el Etna en Sicilia y el Stromboli en las islas Eolias.

Los griegos y los romanos consideraban que se trataba de un lugar sagrado dedicado al héroe y semidiós Heracles/Hércules, del cual tomó el nombre la ciudad de Herculano, situado en la base del monte.

En el siglo I a. C., Pompeya era sólo una de las numerosas ciudades localizadas alrededor de la base del monte Vesubio. El área tenía una considerable población que se hizo próspera por la famosa fertilidad de la región. De las muchas localidades vecinas de Pompeya, la más conocida fue Herculano. También sufrieron daños o la destrucción durante la erupción del 79, que duró cerca de 19 horas, liberando en ese tiempo el volcán cerca de 4 km3 de ceniza y roca sobre una extensa área del sur y sureste del cráter, con cerca de 3 m. de tefra cayendo sobre Pompeya. La blanca ceniza pumítica asociada con esta erupción fue principalmente una composición de leucita y fonolita.

Tito era el emperador de Roma en el año 79.

La erupción del Vesubio del 24 y 25 de agosto del año 79 se desarrolló en dos fases: una erupción pliniana que duró de 18 a 20 horas y produjo una lluvia de pumita en dirección al sur del cono que aumentó la profundidad en 2,8 m en Pompeya mediante un flujo piroclástico, y una nube ardiente en la segunda, una fase peleana que llegó hasta Miseno y que se concentró en el oeste y el noroeste. Dos flujos piroclásticos sepultaron Pompeya, quemando y asfixiando a los rezagados que permanecieron allí. Oplontis y Herculano recibieron la peor parte de los flujos y fueron enterr adas por cenizas y depósitos piroclásticos.

Se estima que en Pompeya vivían de unas 10.000 a 25.000 personas, mientras que en Herculano se estima que debía tener una población de unos 5.000. No se sabe cuánta gente pereció por la erupción, aunque han sido recuperados unos 1.150 restos de cuerpos; para afinar la cifra habría que hacer moldes con sus impresiones en los depósitos de ceniza y los alrededores de Pompeya. En Herculano se han hallado restos de unos 350 cuerpos (300 en criptas arqueadas descubiertas en 1980). Sin embargo, estos números podrían indicar un enorme e infravalorado número del total de muertes en la región afectada por la erupción.

El 38% de las víctimas de Pompeya se hallaron en los depósitos de ceniza; la mayoría dentro de edificaciones. Se cree que murieron principalmente por el derrumbe de los tejados. Fuera de los edificios se encontró un escaso número de víctimas, que probablemente murieron por caídas de tejas o de grandes rocas proyectadas por el Vesubio. Esto difiere de la experiencia actual, puesto que en los últimos cuatrocientos años sólo un 4% de las víctimas murieron por lluvia de cenizas durante erupciones explosivas. El 62% restante de restos hallados en Pompeya], lo fueron en las oleadas de depósitos piroclásticos, y por lo tanto, murierion debido a ellas; probablemente por una combinación de asfixia, durante la inhalación de ceniza, la onda expansiva y los escombros proyectados a su alrededor. En contraste con las víctimas halladas en Herculano, el examen de la ropa, de los frescos y de los esqueletos demuestra que es poco probable que las altas temperaturas fueran una causa significativa.

Herculano, mucho más cercana al cráter, se salvó de la avalancha de tefra gracias a la dirección del viento, aunque quedó sepultada bajo 23 m de material depositado por oleadas piroclásticas. Es probable que la mayoría, o todas las víctimas de esta ciudad murieran por las oleadas, particularmente por las pruebas de altas temperaturas halladas en los esqueletos de las víctimas encontradas en las criptas arqueadas, y la existencia de madera carbonizada en muchos de los edificios.

Pompeya y Herculano nunca fueron reconstruidas, aunque sobrevivieron habitantes de dichas ciudades y probablemente los saqueadores emprendieron un intensivo y salvaje trabajo tras las destrucciones. La erupción cambió el curso del río Sarno y levantó la playa, por eso Pompeya no tiene hoy ningún río ni está adyacente a la costa.

La localización de las ciudades fue olvidada hasta su accidental redescubrimiento en el siglo XVIII. El propio Vesubio ha experimentado grandes cambios: sus laderas están desprovistas de vegetación y su cumbre ha cambiado considerablemente debido a la fuerza de la erupción.

La erupción del año 79 fue documentada por historiadores contemporáneos y se acepta universalmente que comenzó el 24 de agosto. No obstante, las excavaciones arqueológicas de Pompeya indican que la ciudad fue enterrada un par de meses después. Por ejemplo, apareció gente enterrada que llevaba puesta ropa abrigada siendo que en agosto debían vestir ropa ligera. La fruta fresca y los vegetales de las tiendas son típicas de octubre, y en cambio la fruta estival que tendría que ser propia de agosto estaba ya vendida, seca o en conserva. Las jarras de vino fermentado habían sido selladas, lo que tenía lugar hacia el final de octubre. Las monedas encontradas en el bolso de una mujer sepultada en ceniza incluían una pieza conmemorativa que habría sido acuñada a finales de septiembre.

La bahía de Nápoles

Pompeya
1ªParte
a) La bahía de Nápoles

Bahía de Nápoles


El golfo o bahía de Nápoles (en italiana, Golfo di Napoli) es un golfo del mar Tirreno (mar Mediterráneo) que se encuentra en la costa suroeste de Italia. En el golfo se encuentra, al norte, la ciudad de Nápoles -capital de la región de la Campania- y la ciudad de Pozzuoli. Como lugares a destacar encontramos la antigua ciudad romana de Pompeya y el volcán Vesubio, situado al este del golfo. Al sur, cierra el golfo, la península Sorrentina, cuya principal ciudad es Sorrento . Esta península separa al golfo de Nápoles del golfo de Salerno.

El golfo está limitado por las islas de Capri, Isquia y Procida. La región es un importante destino turístico en Italia por las ruinas romanas cercanas de Pompeya y Herculano, destruidas durante la erupción del Vesubio del 79 .

sábado, 14 de noviembre de 2009

Principales edificios del foro romano

El mundo romano
3ªParte
f)Principales edificios del foro romano y los foros imperiales

Templos
:

Templo de Cástor y pólux


Durante la batalla del Lago Regilo entre romanos y latinos en el 496 a. C. el dictador, Aulo Postumio Albino hizo voto de consagrar un templo a Cástor y Pólux. En la batalla se había visto a dos jóvenes luchando de parte de los romanos. Aquella misma tarde de la victoria también se les vio abrevando sus caballos en la fuente Yuturna y anunciaron a los romanos la victoria alcanzada, desapareciendo luego; se les identificó con los Dioscuros. En el lugar de esa aparición se construyó el templo ofrecido por A. Postumio y dedicado por su hijo en el 484 a. C.

Fue reconstruido y embellecido en varias ocasiones, en el 117 a. C. por el cónsul Lucio Cecilio Metello Diademato, elevándose el podio en el 73 a. C. por Gayo Verres, gobernador de Sicilia y también en época de Augusto, tras un incendio en el 14 a. C., finalizándose en el 6.

El templo era períptero (pórticos columnados en el perímetro exterior de la cella), octastilo (ocho columnas en el frente) y con once columnas en los lados mayores en orden corintio. El podio mide unos 50 metros de largo por 30 de ancho y tenía unos 7 metros de altura, construido en mampostería y originalmente revestido con toba, que después fue retirada y reutilizada en otras construcciones. Tres de las columnas han sobrevivido hasta el presente. Se discute si le precedía una escalinata, así figura en la Forma Urbis de época de Septimio Severo, pero no se han hallado restos en las excavaciones. Según una hipótesis, se debieron eliminar para emplazar una de las tres tribunas de oradores que había en el Foro Tria rostra.

Aunque dedicado a los Dioscuros, era más popularmente conocido como Templo de Cástor. Fue en varias ocasiones lugar de reunión del senado.

Templo de Rómulo

El Templo de Rómulo fue identificado durante mucho tiempo como el templo dedicado a Valerio Rómulo, hijo divinizado de Majencio. Hoy se tiende a pensar que es de época constantiniana y que debía estar consagrado a los Penates. El templo original podría haber estado en el área ocupada por la Basílica de Majencio, al construirse ésta, el templo antiguo se emplazó en la vecindad, donde ahora está.

La planta del edificio de ladrillo es circular, con una fachada curvilínea en cuyo centro se abre la entrada, flanqueada por dos columnas de pórfido con bases de travertino y capiteles de mármol que sostiene un alquitrabe del mismo material. La puerta de bronce es la original. A ambos lados del edificio se sitúan cuatro hornacinas y dos salas alargadas y con ábside, precedidas por columnas de mármol veteado que debían alojar las estatuas de los Penates.

En el siglo VI el templo pasó a ser el atrio de la iglesia de los Santos Cosme y Damián, que se levantó en buena parte de lo que era el Foro de la Paz.

Templo de Saturno

El Templo de Saturno (en latín Templum Saturni o Aedes Saturnus) es un monumento dedicado a la deidad agrícola Saturno que se erige en el extremo occidental del Foro Romano en Roma. Representa los cimientos más antiguos conservados en la zona, construido entre 501 y 498 a. C. Algunas fuentes lo atribuyen al rey Lucio Tarquinio el Soberbio y otras a Lucio Furio, si bien esta última dedicación podría corresponder a una reconstrucción hecha tras el incendio por parte de los galos (principios del siglo IV a. C.).

También era llamado Aerarium (‘erario’) porque en él se guardaba el tesoro nacional romano. El templo marca el comienzo del Clivus Capitolinus, el antiguo camino que llevaba a la cima del monte Capitolino.

Las actuales ruinas corresponden a la tercera edificación del Templo de Saturno, que reemplaza a la segunda, destruida en el incendio del año 283.

Según las fuentes, la estatua del dios en su interior, cubierta y provista de una guadaña, era de madera y se rellenaba de aceite. Las piernas se cubrían con tallos de lino que sólo se retiraban el 17 de diciembre, día de la Saturnalia.

Aunque dedicado al dios Saturno, el principal uso del templo era servir de sede al tesoro del Imperio Romano (aerarium), almacenando las reservas de oro y plata. También albergaba los archivos estatales, las insignias y la escala oficial para el peso de metales. Más tarde el aerarium fue trasladado a un edificio frente a él, mientras los archivos se mudaron al cercano Tabularium. El podio del templo, recubierto de travertino, se usó como soporte para carteles.

El derrumbe gradual no ha dejado más que los restos del pórtico frontal en pie, pero las ocho columnas supervivientes y el frontón parcialmente intacto (con la inscripción Senatus Populusque Romanus incendio consumptum restituit, ‘El Senado y el Pueblo de Roma restauró lo que el fuego había consumido’) representan una de las imágenes icónicas de la herencia arquitectónica de la antigua Roma.

Templo de Vesta

Está ubicado al sur de la Vía Sacra, delante de la Regia. Es uno de los templos más antiguos de Roma. En este templo se custodiaba siempre encendido, so pena de grandes desdichas, el fuego sagrado en honor de Vesta, diosa del Fuego y del Hogar.

El edificio fue objeto de varias reconstrucciones, que conservaron la entrada orientada hacia el este y la forma circular de la planta (inspirada en las cabañas de la Edad del Hierro), la más reciente a la cual pertenecen los restos conservados es de la época de Julia Domna, esposa de Septimio Severo en el 191.

El templo, circular se eleva sobre un podio de unos 15 metros de diámetro, la cella esta rodeada por veinte columnas corintias embebidas. El techo era cónico y tenía una abertura para permitir la salida del humo. Dentro de la cella no se encontraba la estatua de culto, sino solo el fuego sagrado. Una cavidad trapezoidal que se abre en el podio y a la que se accedía solo desde la cella parece ser la ubicación del penus Vestae, donde se conservaban los objetos que Eneas trajo de Troya: el Paladio (imagen de madera de Minerva) y las imágenes de los Penates.

El templo fue clausurado por Teodosio en el 394.

Templo de Venus y Roma

El Templo de Venus y Roma (Latín: Templum Veneris et Romae) se sitúa en el extremo oriental del Foro Romano, cerca del Coliseo. Era uno de los templos más grandes de Roma y estaba dedicado a las deidades Venus y Roma. Fue construido por el emperador romano Adriano, que empezó su construcción en 121. Fue inaugurado catorce años más tarde, en 135, pero no fue terminado totalmente hasta el año 141 por Antonino Pío.

Adriano lo construyó sobre los restos del Domus Aurea de Nerón y fue necesario mover la estatua gigante de Nerón, el Coloso de Nerón, que fue situada al lado del Anfiteatro Flavio, también llamado Coliseo, que recibe su nombre de esa estatua. El arquitecto favorito de Adriano, Apolodoro de Damasco, se burló del tamaño de las estatuas de este templo, lo que provocó la ira del emperador, que lo mandó a exiliar y luego ejecutar.

Sufrió un incendio en 307 y fue restaurado por el emperador Majencio. Esta restauración cambió el diseño original introduciendo exedrae, nichos semicirculares, en la parte trasera de cada cela y pavimentando el suelo con mármoles policromados.También sufrió otra restauración, en tiempos de Flavio Eugenio, entre 392 y 394.

Fue destruido por un incendio a principios en el siglo IX y convertido en una iglesia,Santa María Nova, por el papa León IV en 850. En 1615 sufrió otra restauración y pasó a llamarse Santa Francesca Romana.

Era de grandes proporciones, 145 metros de longitud y 100 metros de ancho. El templo consistía en dos celas principales que contenían, respectivamente, a cada una de las dos diosas a las que este templo está dedicado. Las celas estaban dispuestas simétricamente, la que contenía la estatua de Roma, dirigida al oeste y la de Venus al este. A la entrada de cada cela se situaban cuatro columnas.

El lado oeste y el lado este poseían diez columnas (decástilo) y el lado norte y el sur poseían dieciocho columnas, todas ellas de 1,8 metros de ancho y corintias.

Adriano introdujo unas inscripciones nombrando a las respectivas deidades, en la que destaca la palabra amor, ya que Venus era la diosa del amor y amor es Roma escrito al revés produciendo un efecto simétrico.

Actualmente se conserva en un buen estado, conservándose parte del edificio.

Templo de Antonino y Faustina

Es el edificio mejor conservado del Foro Romano. Se abre a la Vía Sacra, al este de la Basílica Emilia, frente a la Regia. Se compone de una cella construida en bloques de toba volcánica, en origen revestida de mármol veteado, un pronaos de seis columnas de orden corintio en el frente y otras dos en cada lateral, de una altura de unos 17 metros. El friso presenta una decoración de grifos enfrentados y motivos vegetales.

Su construcción fue ordenada por Antonino Pío a la muerte de su esposa Faustina la Mayor en 141 d. C. El emperador a menudo decía que habría preferido vivir con ella en el desierto que sin ella en el palacio. Pocos años después, en el 161, muere el emperador y el Senado, al divinizarlo, consagra el templo a la pareja imperial. En el siglo XI se transformó en la iglesia de "San Lorenzo de Miranda".

Templo de Vespasiano y Tito

El edificio fue erigido por Domiciano en honor de su padre Vespasiano y su hermano Tito divinizados.

Se ubica entre los vecinos templos de Saturno y la Concordia. La falta de espacio se refleja en la expansión más a lo ancho que a lo largo (23x33 metros) y en la anomalía de que la escalinata se encuentre encerrada entre las seis columnas del pronaos, de orden corintio y con una altura de 15,70 metros, tres de las cuales, en el ángulo del edificio, han perdurado hasta la actualidad.


Templo de la Concordia

El Templo de la Concordia en la antigua ciudad de Roma fue el principal templo de la ciudad dedicado a la diosa de la Concordia. Se encontraba en el extremo occidental del Foro Romano. Puede que en origen se remontara al siglo VI a. C., pero no hay acuerdo sobre su datación exacta. Fue destruido y restaurado varias veces a lo largo de su historia, y su última restauración, entre los años 7 y 10 a. C. bajo el emperador romano Tiberio, está descrito por Plinio el Viejo en su Historia Natural.

La historia del templo se remonta a las luchas civiles del principio de la República. Para celebrar la pacificaci

ón entre patricios y plebeyos tras la aprobación de las leyes Licinias en 367 a. C., el Senado ordena la construcción del templo en honor de la Concordia que Marco Furio Camilo había prometido si la paz se restablecía.

Una primera reedificación se debe en 121 a. C. al cónsul Lucio Opimio (quien también habría mandado edificar la Basílica Opimia en su vecindad), tras el asesinato de Cayo Graco

Tiberio reconstruyo el templo entre los años 7 a. C. y 10 d. C., esta reconstrucción es que ha conservado, que tiene la curiosidad (co

mpartida con el vecino templo de Vespasiano y Tito) de tener una cella más ancha que larga (45x25 metros), sobre un podio con escalinata de acceso central precedida por un pronaos de seis columnas corintias.

En este edificio se celebraron algunas reuniones del Senado. Tiberio albergó en el pinturas y esculturas griegas.

Este templo principal en el Foro de Roma parece que ha sido el modelo para templos de la diosa Concordia en otros lugares del imperio. Una reproducción de este templo se encontró en Mérida (España).

Templo de Jano

Jano (en latín Janus) es, en la mitología romana, un dios que tenía dos caras mirando hacia ambos lados de su perfil, padre de Fontu

s. Jano era el dios de las puertas, los comienzos y los finales. Por eso le fue consagrado el primer mes del año (que en español pasó del latín Ianuarius a Janeiro y Janero y de ahí derivó a Enero).

Su representación habitual es bifronte, esto es, con las dos caras mirando en sentidos opuestos. Es el dios de los cambios y las transiciones, de los momentos en los que se traspasa el umbral que separa el pasado y el futuro. Su protección, por tanto, se extiende hacia aquellos que desean variar el orden de las cosas. Se le honraba cada vez que se iniciaba un proyecto nuevo, nacía un bebé o se contraía matrimonio.

Su principal templo en el Foro Romano tenía puertas que daban al este y al oeste, hacia el principio y el final del día, y entre ellas se situaba su estatua, con dos caras, cada una mirando en sentidos opuestos. En todos los hogares se le dirigía la plegaria matutina, y en toda tarea doméstica se buscaba su asistencia. Como dios de los comienzos, se lo invocaba públicamente el primer día de enero (Ianuarius), el mes que derivó de su nombre porque inicia el nuevo año. Se lo invocaba también al comenzar una guerra, y mientras ésta durara, las puertas de su templo permanecían siempre abiertas; cuando Roma estaba en paz, las puertas se cerraban. Jano no tiene equivalente en la mitología griega.


Basílicas:

Basílica Emilia

Edificada por los censores M. Fulvio Nobilior y Marco Emilio Lépido en el 179 a. C. y por ello entonces llamada Basílica Æmilia et Fvlvia detrás de las Tabernae novae luego desaparecidas, rodeándola de tiendas que alquiló a particulares. Fue reconstruida en varias ocasiones, sobre todo por miembros de la gens Emilia la primera en el 78 a. C. por el cónsul Marco Emilio Lépido, por lo que recibió el nombre de Basilica Aemilia. Otra reconstrucción de mayor alcance fue emprendida en el 55 a. C. por e

l edil curul Lucio Emilio Lépido Paulo, hermano del triunviro Lépido; las obras no acaban hasta el 34 a. C., con el hijo de éste, L. Emilio Lépido Paulo con la ayuda de Julio César.

El edificio se emplaza ahora sobre las Tabernae novae pero un incendio obliga a reconstruirla en 14 a. C. por el mismo L. Emilio Lepido Paulo y Augusto ya en su forma final, decorándose el pórtico y la cella. La última restauración documentada se efectuó tras el incendio del 410, durante el saqueo de Alarico.

La Basílica Emilia está formada por un gran aula de 70 x 29 metros, dividida en naves por hileras de columnas. La nave central, con una longitud de casi 12 metros está flanqueada por una más pequeña al sur y otras dos al norte. El edificio estaba precedido por el lado del foro por un pórtico de dos pisos con dieciséis arcos sobre pilastras. Por detrás del pórtico hay una serie de tabernae entre ellas se abren las tres entradas que dan acceso al aula.

Basílica Julia

Cierra por el lado sur el Foro Romano, limita al oeste con el Vicus Iugarius separándola del templo de Saturno y al este con el Vicus Tuscus que la separa del templo de los Dióscuros.

Fue empezada a construir por Julio César en el 54 a. C., de quien tomó el nombre sobre el espacio antes ocupado por la Basílica Sempronia, erigida en 169 a. C. por Tiberio Sempronio Graco, padre de los tribunos de la plebe Tiberio y Cayo, quien para edificarla habría demolido la casa de Escipión el Africano y algunas tiendas de las Tabernae veteres. Para despejar el solar, César tuvo además que desplazar la tribuna de oradores a la extremidad oeste del Foro Romano. La Basílica Julia fue acabada por Augusto, pero se incendió en el 14 a. C. y fue reconstruida por el mismo emperador que la dedicó a sus hijos adoptivos Cayo y Lucio en el 12. Sufrió un nuevo incendio en época de Carino en 283 y volvió a ser restaurada con Diocleciano. Una última destrucción parcial sucedió con el saqueo de Alarico siendo reconstruida por el prefecto urbano Gabinio Vetio Probiano.

Actuaba como sede del tribunal de los Centunviros, ciento ochenta jueces que eran el total de los cuatro tribunales juntos.

Era de grandes dimensiones (109x48 metros) con una nave central de 82x18 metros en torno a la cual había cuatro naves menores abovedadas en dos pisos y con arcos enmarcados por semicolumnas. La nave central se dividía en cuatro partes por cortinajes o estructuras de madera que cuando se requería se retiraban para dejar el espacio vacío.

En la escalinata del pórtico se encuentran juegos grabados en el mármol blanco como una especie de damas chinas o un círculo dividido en segmentos.

Basílica de Majencio y Constantino

La Basílica de Majencio estaba situada en el foro de Roma, y fue construida sobre las ruinas del Templo de la Paz de Vespasiano. Era uno de los edificios romanos más importantes destinado a la administración de justicia, y a los tratos comerciales. Su forma y su planta fue copiada en la era cristiana para construir las primeras iglesias. Solía tener una planta de tres naves; una central y dos laterales.

La Basílica de Majencio se inició en el año 306 d.C. bajo el mandato del Emperador Majencio, pero no fue terminada hasta el 312 d.C., ya en el mandato del Emperador Constantino.

Arcos:

Arco de Severo Séptimo

El Arco de Séptimo Severo es un antiguo arco de triunfo que se encuentra en Roma en una extremidad del Foro Romano, a los pies de la colina del Capitolio.

Fue erigido en 203 para glorificar las victorias militares del emperador Septimio Severo y sus hijos Geta y Caracalla bajo los Partos. Es una construcción en mármol, consta de un arco principal encuadrado por dos pequeños arcos. Las fachadas están ricamente decoradas por columnas y bajorrelieves. Bajo el ático de cada fachada, está grabada una larga dedicatoria. Originalmente, las letras grabadas en huecos contenían letras en bronce hoy desaparecidas.

Una cuadriga de bronce conducida por el emperador y sus dos hijos, coronaba el arco antiguamente. Una escalera permite el acceso a la plataforma superior.

Arco de Tito

El Arco de Tito es un arco de triunfo, situado en la Vía Sacra, justo al sudeste del Foro en Roma. Fue construido poco después de la muerte del emperador Tito (nacido en el año 41 d.C. y emperador entre los años 79 y 81 d.C.).

El arco de Tito rememora las victorias de Tito contra los judíos. Las figuras que lo adornan se mueven entre lo real y lo divino, fundiéndose en una misma composición. En una de las escenas representadas aparece un personaje con yelmo (la diosa Roma); en otra escena aparece una “victoria”, que es un ser con alas que coloca la corona de laureles al emperador.

El arco se apoya en un podio sobre el que se encuentra el cuerpo formado por una bóveda de cañón asentada sobre dos pilares decorados con dos pares de columnas adosadas de capitel compuesto y ventanas ciegas en medio. Sobre el cuerpo se encuentra el ático, con una inscripción alusiva a Tito. A diferencia de otros arcos de triunfo como el Arco de Constantino, los relieves se concentran en las enjutas donde aparecen las Victorias que se dirigen a la clave, que destaca sobre el resto del arco. El entablamento está formado por un arquitrabe a tres bandas, un friso que representa el desfile triunfal de las legiones romanas en Jerusalén y una cornisa que soporta el ático. El intradós está decorado con casetones y a ambos lados hay representaciones de la entrada de Tito en Jerusalén, honrado por los soldados que llevan un candelabro de siete brazos.

El Coliseo

El Coliseo (Colosseum en latín) es un gran anfiteatro de la época del Imperio romano, construido en el siglo I en el centro de la ciudad de Roma y bajo jurisdicción de ciudad Vaticano, por su procedencia ligada a el catolicismo. Originalmente era denominado Anfiteatro Flavio (Amphitheatrum Flavium), en honor a la Dinastía Flavia de emperadores que lo construyó, y pasó a ser llamado Colosseum por una gran estatua ubicada junto a él, el Coloso de Nerón, no conservada actualmente. Por sus características arquitectónicas, estado de conservación e historia, el Coliseo es uno de los monumentos más famosos de la antigüedad clásica.

En la antigüedad poseía un aforo para 50.000 espectadores, con ochenta filas de gradas. Los que estaban cerca de la arena eran el Emperador y los senadores, y a medida que se ascendía se situaban los estratos inferiores de la sociedad. En el Coliseo tenían lugar luchas de gladiadores y espectáculos públicos. Se construyó justo al Este del Foro Romano, y las obras empezaron entre el 70 d. C. y el 72 d. C., bajo mandato del emperador Vespasiano. El anfiteatro, que era el más grande jamás construido en el Imperio Romano, se completó en el 80 d. C. por el emperador Tito, y fue modificado durante el reinado de Domiciano.

El Coliseo se usó durante casi 500 años, celebrándose los últimos juegos de la historia en el siglo VI, bastante más tarde de la tradicional fecha de la caída del Imperio Romano de Occidente en el 476 d. C. Así como las peleas de gladiadores, muchos otros espectáculos públicos tenían lugar aquí, como naumaquias, caza de animales, ejecuciones, recreaciones de famosas batallas, y obras de teatro basadas en la mitología clásica. El edificio dejó de ser usado para estos propósitos en la Alta Edad Media. Más tarde, fue reutilizado como refugio, fábrica, sede de una orden religiosa, fortaleza y cantera. De sus ruinas se extrajo abundante material para la construcción de otros edificios, hasta que fue convertido en santuario cristiano, en honor a los prisioneros martirizados durante los primeros años del Cristianismo. Esta medida contribuyó a detener su expolio y a procurar su conservación.

El foro romano

El mundo romano
2ªParte
e) El foro romano

El foro romano
El foro republicano en el siglo II d. C. Reconstrucción y planta.

El Foro Romano (Forum Romanum, aunque los romanos se referían a él comúnmente como Forum Magnum o simplemente Forum) era la zona central en torno a la que se desarrolló la antigua Roma y en la que tenían lugar el comercio, los negocios, la prostitución, la religión y la administración de justicia. En él se situaba el hogar comunal. Series de restos de pavimento muestran que sedimentos erosionados desde las colinas circundantes ya estaban elevando el nivel del foro en la primera época de la república. Originalmente había sido un terreno pantanoso, que fue drenado por los Tarquinios con la Cloaca Máxima. Su pavimento travertino definitivo, que aún puede verse, data del reinado de César Augusto.
Foro de Julio César

Foro de Augusto.

Un
camino procesional, la Vía Sacra, cruza el Foro Romano conectándolo con el Coliseo. Al final del Imperio perdió su uso cotidiano quedando como lugar sagrado.Foro después de César y Augusto.

El último monumento construido en el Foro fue la Columna de Focas. Durante la Edad Media, aunque la memoria del Foro Romano persistió, los monumentos fueron en su mayor parte enterrados bajo escombros y su localización,la zona entre el monte Capitolino y el Coliseo, fue designada Campo Vaccinio o ‘campo bovino’. El regreso del papa Urbano V desde Aviñón (1367) despertó un creciente interés por los monumentos antiguos, en parte por su lección moral y en parte como cantera para nuevos edificios emprendidos en Roma tras mucho tiempo.Se extrajo gran cantidad de marmoles para construcciones papales (Vaticano principalmente) y para cocer en hornos creados en el mismo foro para hacer cal.Miguel Angel expreso en muchas ocasiones su oposicion a la destruccion de los restos. Artistas de finales del siglo XV dibujaron las ruinas del Foro, los anticuarios copiaron inscripciones desde el siglo XVI y una excavación profesional fue comenzada a finales del siglo XVIII. Un cardenal tomó medidas para drenarlo de nuevo y construyó el barrio Alessadrine sobre él. Pero la excavación de Carlo Fea, quien empezó a retirar los escombros del Arco de Septimio Severo en 1803 y los arqueólogos del régimen napoleónico marcaron el comienzo de la limpieza del Foro, que no fue totalmente excavado hasta principios del siglo XX.

Reconstrucción del foro de Trajano desde la terraza de la basílica Ulpia.

En su estado actual, se muestran juntos restos de varios siglos, debido a la práctica romana de construir sobre ruinas más antiguas.

Existieron foros en otras zonas de la ciudad, conservándose restos en ocasiones considerables de la mayoría de ellos.